El viernes pasado fui a ver tocar a Senderos, la banda de mi hermano Damián. Precisamente el estribillo del tema que le dio nombre a la banda dice eso de "Nada te impide no estar", y me puse a pensar cómo se nos hace creer permanentemente que tenemos que tomar partido siempre, que tenemos que estar en un lado de cualquier confrontación, bajo la pena de sentirnos unos traidores o de no ser seres humanos o artistas "comprometidos".
Yo trato de estar en el lado de afuera. Como decía un escritor argentino, el lado de afuera no es un lado ni es otro, es el lado de afuera, donde experimentás la más eufórica de las soledades. Pero no es por eso, no es por estar solo, sino por tener una perspectiva más amplia. El que está dentro de la diálectica del enfrentamiento no ve los motivos (ni los propios ni los ajenos), está demasiado ocupado luchando como para ver otra cosa que no sea el enemigo frente a él. Y hay que ver y saber más que eso. Hay que saber que la mayoría de las veces, cuando entramos en una turba ciega que sólo quiere arrancarle los ojos a otra turba ciega, estamos haciéndole el caldo gordo a algún hijo de puta que se beneficia de nuestro sufrimiento.
Yo trato de no caer en eso. No pertenezco a ninguna religión, ningún partido político, ningún cuadro de fútbol, y en general trato de estar fuera de cualquier polarización pelotuda que sólo sirva para dividir. Lo cual no quiere decir que no tenga ideas religiosas ni políticas, sino que me reservo el derecho de usar los dogmas políticos y religiosos que otro quiera imponerme como el más suave papel higiénico.
Así que ya sabés: cuando traten de enfrentarte a otro bando para que alguien recoja las migajas y baile sobre tu sangre, acordate de que nada te impide no estar.
Yo trato de estar en el lado de afuera. Como decía un escritor argentino, el lado de afuera no es un lado ni es otro, es el lado de afuera, donde experimentás la más eufórica de las soledades. Pero no es por eso, no es por estar solo, sino por tener una perspectiva más amplia. El que está dentro de la diálectica del enfrentamiento no ve los motivos (ni los propios ni los ajenos), está demasiado ocupado luchando como para ver otra cosa que no sea el enemigo frente a él. Y hay que ver y saber más que eso. Hay que saber que la mayoría de las veces, cuando entramos en una turba ciega que sólo quiere arrancarle los ojos a otra turba ciega, estamos haciéndole el caldo gordo a algún hijo de puta que se beneficia de nuestro sufrimiento.
Yo trato de no caer en eso. No pertenezco a ninguna religión, ningún partido político, ningún cuadro de fútbol, y en general trato de estar fuera de cualquier polarización pelotuda que sólo sirva para dividir. Lo cual no quiere decir que no tenga ideas religiosas ni políticas, sino que me reservo el derecho de usar los dogmas políticos y religiosos que otro quiera imponerme como el más suave papel higiénico.
Así que ya sabés: cuando traten de enfrentarte a otro bando para que alguien recoja las migajas y baile sobre tu sangre, acordate de que nada te impide no estar.
1 comment:
hey! soy lucas de senderos. no sabia q habias ido a vernos, recien hoy me pasaron el link. buenisimo q la cancion te haya podido transmitir algo. gracias por el posteo. abrazo.
Lucas.G.
www.lucasghio.blogspot.com
Post a Comment