Tuesday, August 19, 2008

Más libros

Acabo de linkear dos "libros" (por decirlo de alguna forma) de relatos, escritos por quien ésto suscribe entre los 19 y 25 años, más o menos, contando reescrituras y correcciones.
Una serie pretendía ser una novela, pero terminó siendo un compilado llamado Aceptar la derrota, por razones que se explicitan en el epílogo de dicho combo de relatos.
El otro pretendía ser una saga familiar de asesinos, algo así como el padrino pero con muchos menos lazos con el mundo real.
No creo que vaya a trabajar más en ellos, así que ahí quedan, como escritos de juventud de los cuales rescatar algo pero avergonzarse en su mayoría.
Los textos que corregís más de lo necesario, a los que les dedicás demasiado de tu tiempo, son como el monstruo de Frankenstein: cosas hechas de pedazos de distintas épocas (lo cual, en un escritor, es lo mismo que decir distintas personas) que al final acaban por asesinar otros relatos con vida propia a los cuales podrías llegar a querer y hacer crecer, si dejás de lado la obsesión por el monstruo.
Así que, ahí quedan los monstruitos.

1 comment:

LiLiTh said...

mi vision de la vida no cambio desde la primer respuesta que te di. aun puedo como aquel dia reparar corazones rotos con los pedazos que quedan, asi vivo y yo soy mi propia fe. la madre que compartimos me enseño a ver amor, el padre que nos abandono me enseño a ver dolor. una vive, aunque va a morir, y el otro muerto aun vive en mi. los padres nos dejan un legado que jamas olvidamos. y de alguien que abandone aprendi que el desagradecimiento es un gran insulto a uno mismo. la derrota no existe, no es un hecho tangible, es una sensacion interna. si no queres enseñarle a tus hijos el fracaso JAMAS te sientas un fracasado. por la cantidad de veces que uno se cae y se levanta, por la cantidad de cosas que duelen y no nos matan, por el sobrevivir diario y las personas que hacen la vida digna de ser vivida, por ese hermoso pedacito de luz divina que es tu criatura, se agradecido. y si algun dia criticaste a la sociedad, recorda que el triunfo que ella nos enseña no es objetivo. espero que no te sientas como tus palabras me hicieron ver.
y a ver si alguna vez hablamos mas alla del como estas, alejados de tu señora al menos.
decile a Lu que la tia Ary le manda muchos besos.