Saturday, July 05, 2014

Action Comics de Grant Morrison














----------------------------------------------------------------



Action Comics de Grant Morrison

Decepción. Eso es lo que sentí al terminar de leer el número 17 de la serie regular de Superman de ECC, de la cual compré sólo los números que reproducían los episodios de Action Comics guionizados por Grant Morrison, pensando que valdrían la pena en contraposición a los demás. Si son mucho mejores que los números de Superman, la verdad es que compadezco a los pobres incautos que los compraron y debieron leerlos. En realidad yo fui uno de esos incautos porque compré dos números de George Perez y la verdad es que daban pena, pero bueno...

Hay que decid de entrada que el de esta serie parece un Grant Morrison cansado, un Grant Morrison que ya puso el grueso de sus buenas ideas para el personaje en All-Star Superman y debió rasquetear el fondo de su vasija de ideas para buscar algo con lo que rellenar Action Comics. Y creo que lo que encontró fue la posibilidad de reversionar “¿Qué pasó con el hombre del mañana?” de Alan Moore: Mister Mxyzptlk, la Legión de Superhéroes, Brainiac, Lex Luthor, Metallo, las distintas clases de kriptonita... lo cierto es que la serie no parece algo salido de la cabeza de Morrison sino un arco argumental nostálgico regurgitado por cualquier guionista del montón con chispazos de genialidad circunscritos a una viñeta, a una idea visual, a una frase dentro de un diálogo.
Morrison ha decidido, eso sí, hacer uso de una estructura caótica que recuerda a otras obras de su autoría. Ha decido hace tiempo que aunque las historias internamente, en su desarrollo orgánico, vayan del punto A al punto B al punto C, él puede optar por mostrarnos el punto a, el H, el M y el X, en sucesión atropellada y deshilvanada, porque está seguro de que con eso nos alcanza para comprender lo que quiere contar y de que, si no lo comprendemos, nosotros, sus fans, nos culparemos a nosotros mismos por tarados en lugar de culparlo a él por innecesariamente complicado. Por supuesto, eso crea problemas de ritmo importantes y una sensación de falta de estructura que molesta mucho a la hora de leer. Pero uno se la banca durante diez, once números, porque es Grant Morrison y espera que al final todo valga la pena, que la historia funcione por acumulación y se cierre placenteramente con un giro genial e inesperado... cosas que nop, no pasa. De hecho, entre la laxitud general, los dos últimos números son sin duda los más flojos.

Pesa mucho Krypto en la historia, al punto que a veces me hacía acordar a Bolt, la película de Dysney, por la utilización emotiva de la relación entre “un niño y su perro”. Además, Morrison ya tuvo éxito con los animales en We3, así que es más o menos lo suyo.

No hay mucho más para destacar.

Los dibujos de Rags Morales, bien. Lástima que no dibuje todos los números. De los suplentes o colaboradores, muy bien Gene Ha, muy bien Cully Hammer, enorme Chris Sprouse.

Los rediseños de Metallo y Steel, un asco.



-

No comments: